martes, febrero 28, 2006

1 -Un día muy largo-

He decidido escribir un diario a mano. Debo tener mucho cuidado con el, no guardarlo en cualquier sitio. Si alguien leyera lo que voy a escribir aquí se me caería el mundo encima. Tengo un gran secreto que me está haciendo la vida imposible. Hoy alguien se ha enterado por primera vez en toda mi vida, por culpa de una inspección de los discos duros de los ordenadores de la empresa. Casi se me cae el alma a los pies cuando mi jefe me ha enviado a su despacho para enseñarme las fotos que había en mi pc.

Me he quedado sin trabajo. Volviéndo a casa en el metro, he decidido que necesito una vía de escape, un confidente que no me suelte una hostia ni me escupa a la cara cuando le hable de mi verdadero yo. He comprado un cuaderno de tapa dura, y un bolígrafo color azul, y ahora mismo estoy en un parque escribiéndo esto, pero necesito también una persona física.

Tengo 21 años y vivo con mis padres. La gente que me rodea me considera una persona abierta y divertida, aunque en realidad creo que no lo soy tanto... creo que soy demasiado buen actor. Me gusta mucho el cine, a veces me paso tardes enteras después del trabajo encerrado en mi habitación mirando durante horas el monitor de mi ordenador. Ahora no tendré que esperar a volver. También me gusta mucho leer, aunque últimamente no lo hago tanto. Me encanta comer tartitas para desayunar, sobre todo si tiénen chocolate fundido por encima. Estoy un poco gordo, y mi madre no hace más que repetirmelo una y otra vez: -Pónte a régimen, que no vas a encontrar ninguna chica- Jah! como si a mi me interesara encontrar novia.

No me apetece buscar trabajo, asique me apañaré con los cuatro duros que tengo al menos para sobrevivir un mes sin hacer nada. Por lo menos tengo comida y alojamiento gratis, a costa de mis papis.

Eque reviento: necesito contarle a alguien el secreto que he guardado desde que tengo uso de razón. Algo que sólo sabe mi jefe y ha sido la causa de mi despido. Un despido improcedente e ilegal, debo añadir. Aunque no pienso denunciar, sólo quiero desaparecer de ese entorno. Estoy mintiendo a todo el mundo, y estoy harto. Hoy mismo se lo voy a contar al que, hasta hoy, es mi mejor amigo: Sergio. He quedado con él aquí dentro de diez minutos.

Estoy muy nervioso: voy a contarle que soy gay.